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Seguir comprandoEl café de origen único y los blends son dos de las principales categorías dentro del café de especialidad, que actualmente domina el mercado en la industria cafetera.
Hoy en día, existe una gran flexibilidad al momento de seleccionar variaciones en los niveles de tueste, blends, acidez e incluso perfiles de sabor. Para quienes están iniciando su camino en el mundo del café, la variedad puede resultar abrumadora.
Sin embargo, con un poco de información, es posible determinar qué tipo de café se adapta mejor a los gustos y preferencias de cada persona.
Un blend de café es una mezcla de granos de café de origen único.
Existen diversas formas en las que los tostadores pueden preparar blends. Algunos incluyen mezclas de café de un país o región específica, mientras que otros combinan granos de diferentes países. Los tostadores experimentan con una variedad de combinaciones de granos para resaltar distintas notas de sabor, logrando una taza de café deliciosa y bien equilibrada.
Las cafeterías suelen crear blends como productos exclusivos o de temporada, y los blends constituyen una gran parte de los cafés que se encuentran en supermercados. Muchas personas disfrutan los blends por su consistencia en el sabor y su relativa unicidad dependiendo de la cafetería visitada.
Además, es fácil diferenciar los blends en las tiendas: la mayoría de las veces, estos están claramente etiquetados como blends en sus respectivos empaques.
El café de origen único proviene de granos cultivados y procesados en la misma ubicación o cosecha (y a menudo de la misma finca). Generalmente, este tipo de café se identifica con el nombre de un país específico en su empaque (por ejemplo, Café Kona de Hawái o Café Sumatra de Indonesia).
Las personas que disfrutan el café de origen único aprecian sus notas de sabor únicas. Al ser “puro,” su sabor original se conserva. Las diferentes regiones tienen climas y condiciones de cultivo distintas, lo que genera sabores notablemente variados. Por ejemplo, el café colombiano es conocido por sus sabores a chocolate, caramelo y frutas, mientras que el café mexicano destaca por sabores a chocolate y nuez.
Aunque los cafés de origen único ofrecen una experiencia aventurera, su sabor tiende a ser inconsistente a largo plazo debido a los cambios climáticos que afectan las cosechas.
Para contrarrestar esto, los tostadores crean blends que son consistentes en sabor y menos vulnerables a los cambios estacionales. Los blends suelen ser la elección predeterminada para el espresso en las cafeterías, ya que combinan bien con leche y azúcar. Además, su sabor homogéneo atrae a un público más amplio. Los blends también ayudan a las cafeterías a diferenciarse, ya que suelen ser creados específicamente para ellas y vendidos de forma exclusiva.
Los tostadores ofrecen café de origen único para satisfacer a quienes buscan una taza de café única y una experiencia exclusiva de sabor en su forma más pura. Los clientes pueden probar café de todo el mundo y apreciar las sutilezas entre diferentes países.
El aroma, la acidez y los sabores del café de origen único suelen ser más pronunciados que los de los blends. Algunas cafeterías incluso tienen derechos exclusivos para vender ciertos cafés de origen único, lo que los hace aún más exclusivos.
El café de origen único generalmente se prepara como pour-over o café de goteo, métodos que destacan mejor el sabor original del café.
La diferencia más notable entre el café de origen único y los blends radica en su sabor. El café de origen único tiende a ser más brillante, con notas florales o cítricas, mientras que los blends suelen tener sabores a chocolate, caramelo y nuez.
El café de origen único refleja el sabor de su región de origen de manera pura, ya que no se combina con otros granos ni se altera. Sin embargo, debido a que su sabor depende del clima y las condiciones del cultivo, puede variar ligeramente de una temporada a otra. Por otro lado, los blends ofrecen un sabor más equilibrado y consistente, ya que su mezcla minimiza las variaciones estacionales.
Con los blends, rastrear el origen suele ser difícil o ambiguo. En el mejor de los casos, los tostadores incluyen el país de origen del blend, pero no información específica sobre la finca o el productor.
En cambio, el café de origen único generalmente puede rastrearse hasta un país, una finca, un productor e incluso el lote donde se cultivó. Esta información es valiosa, ya que permite a los consumidores comprender mejor el café que están bebiendo y apreciar a los agricultores y trabajadores detrás del proceso. Esto es un pilar importante del movimiento de la “tercera ola” del café, que busca reconocer el valor de las fincas cafeteras y conectar las raíces del café con el consumidor.
La elección entre cafés de origen único y blends depende de las preferencias personales. Aquí hay algunas sugerencias que pueden ayudar: